El mercado inmobiliario está creciendo a pasos agigantados en Latinoamérica, presentando un dinamismo como no se había visto en casi una década. Los años post pandemia han sido clave para que las desarrolladoras inmobiliarias se enfoquen en adaptarse tanto a las nuevas necesidades macroeconómicas, como a las demandas del mercado.
Argentina, a pesar de atravesar un año de dificultades económicas, mantendría expectativas positivas sobre el posible desempeño del mercado inmobiliario de cara al 2025. No solo se trata de un aumento en el valor de las propiedades, sino incluso de cambios en la forma en la que se promocionan los inmuebles a las nuevas generaciones.
Perspectivas para el 2025
Buena parte de los cambios que se esperan para el próximo año no estarían respaldadas por declaraciones aisladas, sino por consensos entre distintas entidades y empresas del sector. Para las agencias y desarrolladores inmobiliarios argentinos, estos serían algunos aspectos clave a tener en cuenta de cara al 2025:
Recuperación del valor
Una de las cosas que los operadores tendrán que vigilar de cara al 2025 es la recuperación del valor de las viviendas, con la caída experimentada en los últimos años quedando solo como un recuerdo de tiempos pasados.
Aunque es imposible determinar el crecimiento exacto, se estima que el sector estaría experimentando un aumento de al menos 5,7%.
Si bien esto disminuye la demanda en cuanto a viviendas se refiere, especialmente entre inversionistas extranjeros, quienes ven un atractivo menor en la adquisición de inmuebles, se trata de un fenómeno atractivo para los propietarios actuales, quienes ven una mayor rentabilidad en propiedades que hasta hace solo meses se estaban vendiendo a pérdida.
Modernización de propiedades
Otra de las tendencias que se posiciona a medida que el sector inmobiliario muestra señales de recuperación, es un incremento en los estándares a los cuales están sometidas las propiedades, con los compradores siendo mucho más conscientes sobre la creación de valor a través de la modernización de propiedades.
Esto no solo incluye un mayor interés en construcciones que saquen provecho a tecnologías novedosas como el Internet de las Cosas o la Inteligencia Artificial, sino también en medidas que mejoren la calidad de vida de los propietarios e inquilinos, como pueden serlo las cámaras de seguridad para condominios.
Regreso de los créditos
Al igual que ocurre en países que experimentan una devaluación importante, durante los últimos años la Argentina presenció una caída en la concesión de financiamiento, especialmente de créditos hipotecarios, ya que estos no suelen indexarse de forma precisa a la inflación, haciendo que sea complejo sancionar el incumplimiento en los pagos.
Sin embargo, con un peso que mostró un crecimiento del 40% durante el 2024, y un mercado inmobiliario que está camino a experimentar un crecimiento del 100%, se espera que cada vez más entidades financieras vuelvan a otorgar créditos hipotecarios diseñados para distintos tipos de clientes.
Oportunidades de inversión
El crecimiento en el valor de las propiedades, tanto de vivienda como comerciales, está dando paso a un mayor número de oportunidades de inversión. El crecimiento anteriormente del 5,7% en el valor de las viviendas no solo sería una ganancia real para los propietarios actuales, sino una promesa de rendimientos aún mayores para quienes se arriesguen a invertir.
Para el 2025, los especialistas auguran un crecimiento en el precio cercano al 6% en comparación con las cifras actuales, lo que puede representar ganancias de millones de pesos a quienes inviertan antes de que finalice este año.
Sin embargo, no solo las viviendas serían una inversión atractiva, sino que se prevé una revalorización importante en espacios diseñados para actividades económicas, desde el comercio hasta la agricultura.
Crece el alquiler
Aunque exista una imagen de recuperación económica en la Argentina debido a las recientes políticas gubernamentales, lo cierto es que el poder adquisitivo estaría cayendo en picada, todo al tiempo que los precios de los inmuebles incrementan para ajustarse a un mercado que no guarda relación con la realidad de la población.
Como consecuencia, se estima que cada vez menos personas tengan la capacidad económica para adquirir un nuevo inmueble, motivo por el que el sector del alquiler está creciendo velozmente.
Para el 2025, los operadores inmobiliarios tendrán que enfocarse aún más en crear condiciones atractivas y seguras para brindar una experiencia positiva a los arrendatarios.
Aunque no todos los países de la región presentan las mismas tendencias, varios de los puntos anteriormente mencionados se repiten en muchos de los países vecinos. Por eso, los operadores argentinos no solo deben enfocarse en las tendencias del mercado, sino también en la realidad de la población, brindando productos y experiencias que realmente puedan beneficiar su desarrollo.
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