La parte dura de nuestro trabajo, como Martilleros, consiste en decirles a los propietarios que el precio de su propiedad no condice con el valor que ellos suponen.
Como propietarios, siempre tendemos a colocar a nuestro hogar un valor mayor al precio que el mercado está dispuesto a pagar.
Primero tenemos que saber qué es una tasación. Tasar se podría definir como estimar el valor económico de un bien en relación con el mercado actual y aplicando una metodología determinada. Básicamente, esto significa que la tasación tiene validez para un momento específico, ya que, en función a los cambios en el mercado, el precio puede variar y también, que sólo pueden tasar quienes tienen formación técnica para hacerlo, o sea, los Martilleros o Corredores Inmobiliarios.
¿Qué aspectos influyen en una tasación? Algunos de los aspectos más importantes a considerar son la ubicación del inmueble, el tipo de vivienda, su superficie, distribución, orientación, la calidad de los materiales empleados, la antigüedad, el estado de conservación, si el inmueble tiene reformas, cuáles son los servicios que hay en la zona, entre otros.
Si bien hay distintas técnicas para realizar una tasación es fundamental tener en cuenta los “comparables” y los “precios de cierre”. Los comparables son propiedades publicadas que compiten con la que estamos tasando, y es importante considerarlas para analizar qué hay en oferta y a qué precios están publicadas. Es vital saber cuánto hace que los avisos de esas unidades están online, ya que hay mucho stock sobrevaluado publicado; así podremos determinar un valor competitivo para la propiedad. Por otro lado, es vital contar con precios de cierre de propiedades con similares características, vendidas en la misma zona en los últimos meses para saber cuál es el valor de metro cuadrado que el mercado está validando.
¿Pero, porque es tan importante la tasación cuando se quiere vender una propiedad? Porque sin una tasación real y adecuada al momento actual, difícilmente se pueda concretar una operación en el corto plazo. Y en un mercado que tiende a la baja, como es el nuestro en este momento, dejar pasar el tiempo, implica perder dinero.
Lógicamente, el dueño que trata de vender su vivienda exige la mayor cotización posible; de hecho, suele costar llegar a un acuerdo por el precio de publicación. Pero, el propietario debe entender que más allá de su pretensión o necesidad de dinero y del valor afectivo de su inmueble, le tiene que dar relevancia al número que surgirá de la tasación profesional, ya que es el mercado (oferta y demanda) el que indicará el verdadero precio de su propiedad.
Una tasación es una investigación de mercado y debe ser tratada con la relevancia que dicha investigación merece y realizada por los profesionales que están habilitados para realizarla, ya que de ello depende la venta o no de la propiedad y detrás de esa venta, solucionar el problema de los clientes.
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por CEDOC
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