Friday 29 de March, 2024

OPINIóN | 06-03-2020 16:40

 ¡Cuidado, Presidente!

El Partido Justicialista ha sido, de un tiempo a esta parte, más que una herramienta electoral, el tren fantasma del movimiento.

El peronismo en este siglo, porque con Perón era otra cosa, se autopercibe como un movimiento en el que el que gana conduce y el que pierde acompaña. En ese esquema se justificaron los vaivenes ideológicos del movimiento que pudo ser liberal con Carlos Menem o conservador con Eduardo Duhalde. Progre-populista con los Kirchner y ya veremos con Alberto Fenrández, que a veces pinta más bien socialdemócrata y otras liberal-democrático. Y otras, una de cal, una de arena, una de cemento y echale agua.

Los peronistas que ganan siempre sueñan con ser Perón, que aún derrocado y exiliado era el jefe indiscutido del movimiento. Al Presidente Fernández le falta mucho rodaje todavía para eso. Primero, porque 90 días de gobierno no le alcanzan a nadie para definir un buen o mal gobierno. Y menos son para consolidar un liderazgo indiscutible, sea del signo que sea y empujado por los vientos que empujen. Y segundo, porque todavía está en discusión de que si el que ganó fue Alberto, si ganó Cristina, o corriendo desde atrás y subiéndose al carro del Frente de Todos a último momento fue Sergio Massa, que tenía más peso para hacer perder, si no estaba, que para hacer ganar, si se sumaba.

Los peronistas siempre dicen que lo importante y trascendente es el movimiento. Y que el Partido Justicialista es apenas una herramienta electoral. Pero para las próximas elecciones falta más de un año y medio y el PJ se reunió ayer en Ferrocarril Oeste para definir su normalización de acá a mayo. 

Podríamos decir, entonces, que el peronismo empezó a delinear ayer su campaña hacia las elecciones de medio término, que siempre desvelan a los que mandan, porque suelen significar un plebiscito a la gestión y una escala hacia la reelección si todo le sale bien. Pero es Alberto Fernández el que fue votado para conducir el país. Y estas movidas refuerzan el interrogante sobre si fortalecerán su liderazgo de un proceso político sanador o lo van a encerrar una vez más en la lógica ya fracasada del peronismo y el anti peronismo.

Porque el PJ ha sido, de un largo tiempo a esta parte, más que una herramienta electoral, el tren fantasma del movimiento. Y la Argentina necesita abrirse paso hacia el futuro y no insistir en los reflejos que nos devuelve el espejo del pasado.

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Edi Zunino

Edi Zunino

Director de Contenidos Digitales y Audiovisuales del Grupo Perfil.

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