Gabriel Berard, el jefe de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, y su hermano gemelo Gustavo están siendo investigados por la Oficina de Transparencia del Ministerio de Seguridad porteño por la celebración de sus cumpleaños en el boliche Jet. El caso escaló porque el jefe habría pedido a los comisarios y superintendentes un regalo mínimo de 200 dólares por persona. Esto quedó plasmado en un mensaje de Whatsapp que se viralizó entre los comisarios y que decía: “Se viene el cumpleaños del jefe y este año el regalo lo quiere en verdes”.
Las fuentes policiales consultadas por esta revista sostienen que Berard suele tener este tipo de excentricidades de aprovechar el aniversario de su natalicio para lucrar con la capacidad policial de conseguir dinero. En años anteriores habría armado una lista de regalos similares a las que se hacen en los casamientos, con electrodomésticos como cafeteras, licuadoras, procesadoras y tostadoras, entre otros productos. Cuando NOTICIAS consultó a Berard por su cumpleaños, afirmó que el boliche “se alquiló un mediodía” y que no se trataba de todo el boliche sino de “un salón por el lapso de tres horas”. Y agregó que “se invitaron a los jefes policiales y se hizo un asado de camaradería”. Respecto del dinero, dijo que “no hubo lista de regalos en dólares”. Luego de la publicación de la nota original que desató la investigación interna, se contactaron con esta revista más fuentes de la policía para ratificar que les habían pedido dinero. Algunos de ellos, los más indignados, dijeron que se sintieron “extorsionados” por el excéntrico pedido del jefe.
En la fiesta hubo barra libre con tragos y cerveza y música. Habría durado más de las tres horas mencionadas y, tal vez lo más grave, se hizo en horario laboral, dejando a toda la cúpula de la Policía de la Ciudad sin jefes a mano para resolver consultas.
La investigación interna está en manos del subsecretario de Transparencia, Alfonso Palmou, que depende del ministro Gustavo Coria. Desde el ministerio dijeron a NOTICIAS que “siempre que se cuestiona la conducta del personal policial, se inicia una investigación de oficio”.
Ahora queda esperar qué resolución tomará el ministerio y si irán a declarar alguno de los 17 superintendentes o los más de 50 comisarios y comisarias comunales y vecinales que dependen de Berard.
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