**** (CUATRO ESTRELLAS) Semanas atrás “La Peña de Morfi” el magazine de casi seis horas de duración que conduce Gerardo Rozín, en compañía de Jésica Cirio, volvió a la pantalla de Telefe. En su quinta temporada, nuevamente ofrece la mejor música, de la mano de reconocidos artistas nacionales e internacionales y mucho humor.
Por supuesto, la gastronomía es uno de los pilares, con la guía del cocinero Santiago Giorgini, que homenajea las raíces culinarias argentinas y distintas propuestas a cargo de sus colegas Chantal Abad y Rodrigo Cascón; en tanto, Ariel Rodríguez aporta novedades deportivas; y los segmentos humorísticos están cargo de Toti Ciliberto, Alejandro Gardinetti, Roberto Peloni y Pato Muzzio. En otro orden, el cardiólogo Jorge Tartaglione y el cirujano y periodista Guillermo Capuya, se turnan para responder dudas sobre el COVID-19. Todos enmarcados en la colorida escenografía de Luis Gonzáles Oliva que une la amplia cocina integrada con un patio provisto de parrilla y mesas.
Para dar cuenta de la excelente producción de este ciclo basta mencionar que, en el primer programa, se dieron el lujo de contar con las actuaciones de Karol G, la colombiana que es una de las latinas más escuchadas del momento, el dúo venezolano Mau y Ricky (hijos de Ricardo Montaner), Elena Roger y la agrupación Escalandrum, y el famoso violinista libanés Ara Malikian desde Madrid, entre otros.
Resulta importante recordar que, por la peña, ya pasaron más de mil cantantes, entre los que se destacan David Bisbal, Luis Fonsi, Soledad, Luciano Pereyra y Joan Manuel Serrat, por mencionar sólo algunos. Es que, desde los comienzos, el envío definió su perfil exigiendo a los músicos tocar en vivo, sin excepciones.
A raíz de la pandemia de coronavirus y el aislamiento preventivo obligatorio, estas intervenciones debieron apelar a móviles o a la transmisión online. Así se pudo disfrutar de las interpretaciones de Fito Páez, Sandra Mihanovich o Lali, pero desde sus casas. Eso sucedió también el último domingo, donde Abel Pintos presentó nuevas versiones de sus temas más populares.
Sin duda, “La peña…” hace honor a su nombre y brinda un clima festivo, al que suma que el público puede interactuar con los invitados o panelistas.
Dada la extensión, es realmente admirable el buen ánimo y entusiasmo que mantiene Gerardo Rozín para conservar el ritmo y la dinámica. Atento a cada uno de los detalles y con gran capacidad de adaptación, logra que el entretenimiento esté asegurado en un agradable encuentro dominguero.
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