El Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) demanda un gran esfuerzo fiscal para llegar a 9 millones de trabajadores desocupados o informales, pero son solo 10.000 pesos cada dos meses. Es decir, 5.000 pesos por mes.
En plena debacle por la pandemia, muchas personas que trabajan en la formalidad o en negro se arman su propio IFE verde. ¿Cómo? Comprando los 200 dólares mensuales que les permite el Banco Central y vendiéndolos en el mercado blue o ilegal. Es lo que desde los años del cepo cambiario K se llama hacer puré, y que volvió a practicarse desde que Mauricio Macri volvió a imponer controles y sobre todo desde que la brecha entre tipos de cambio oficial y paralelo se amplió con Alberto Fernández.
La operatoria comienza sencilla. Por home banking desde su computadora o celular, sentado en su casa o en la calle, se adquieren 200 dólares por 99,78 pesos cada uno, porque se paga el tipo de cambio oficial (76,84) más el impuesto solidario del 30%. Es decir, que se abonan 19.956 pesos.
El siguiente paso es retirar esos 200 dólares del banco. En algunos cajeros de la red Banelco se pueden sacar billetes estadounidenses, pero no en los de la Link. Si no, el cliente se los lleva por ventanilla, previo pedido de turno en la sucursal.
El tercer paso es recurrir a un cuevero o arbolito para cambiar los 200 dólares a pesos según la cotización blue, es decir, a 127 pesos por "verde". En la ahora casi desértica calle Florida sigue habiendo arbolitos. Las cuevas, que funcionan en financieras, sociedades de bolsa, casas de cambio y otros negocios, operan con disimulo por la cuarentena, pero recurren al delivery. Hoy en día, con 200 dólares se pueden conseguir 25.400 pesos.
Es así que cada mes un ciudadano puede hacerse con una diferencia de 5.444 pesos, similar al IFE. La operatoria es ilegal, viola la ley penal cambiaria, pero a las autoridades le resulta difícil de controlar. Solo que quien lo haga debe estar prevenido de no depositar esos 5.444 pesos en la cuenta bancaria porque estaría blanqueando dinero negro. O sea, deberá manejarlo en efectivo e ir gastándolo. Con los precios de hoy, se le irán rápido de las manos.
por R.N.
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