Vanesa Biasoli: Mindfulness, la técnica que cada vez utilizan más hombres y mujeres en su liderazgo personal y laboral

Usar técnicas como la meditación para aquietar la mente y relajarnos suele ser bastante sabido en los últimos años.

Lo que ahora no se solía escuchar con frecuencia era utilizar la meditación, en particular mindfulness, como técnica revolucionaria para visualizar una jornada laboral productiva, visualizarse antes de ingresar a una sala de reuniones, ir a una entrevista laboral, dar una charla de fin de año ante un público numeroso, tener una conversación incómoda con alguien, y así podría seguir nombrándote cientos de ejemplos más.

Ya sea de manera particular o dentro de una organización, siempre nos estamos liderando; puede que en la empresa no tengamos un rol asignado como líderes, pero lo estamos haciendo cada día y en cada momento, y lo reflejamos en la forma en la que nos autolideramos. Así se observa cuando alguien es más autónomo, creativo, desenvuelto, resolutivo, flexible y empático.

Y para que dicho liderazgo personal y laboral sea efectivo es fundamental comenzar a tener un mayor conocimiento de cómo pensamos de nuestra forma de ver el mundo, nuestras creencias, miedos, inseguridades, frustraciones, etc.

La técnica de mindfulness nos ayuda a entrar en conocimiento con nosotros mismos, a escucharnos, a estar presentes en el aquí y ahora, a interpretarnos y desde ahí poder modificar lo que queramos.

A parte de modificar, también nos prepara emocionalmente para hacerle frente a esas situaciones de la vida diaria o laboral que tengamos que atravesar: la crianza de los hijos, un duelo, separación, mudanza, un examen, temas de salud, y cualquier situación de la vida que podamos sentir que nos genera estrés.

La técnica se basa en estar conscientes del momento presente; podría ser escuchando y sintiendo nuestra respiración, registrando cómo está nuestro cuerpo o qué sonidos externos estamos escuchando, sintiendo algún perfume o saboreando una comida. También mindfulness nos permite permanecer de manera dinámica en movimiento, y obtener grandiosos resultados haciendo la práctica de forma activa, por ejemplo, mientras realizamos algún deporte, nadamos, caminamos, jugamos con nuestros hijos, cocinamos, escribimos o salimos a pasear con una mascota.

Es común escuchar, cuando alguien comienza a dar sus primeros pasos en la meditación, expresiones como:

”me es imposible no pensar en nada”

“no puedo poner mi mente en blanco”

“pienso en cualquier cosa y me desconcentro”

“me aburro y enseguida abandono”

“siento que pierdo tiempo”

“no veo resultados al instante”

y otras tantas objeciones más que son súper normales y tenemos que naturalizarlas.

Para el cerebro, al no estar acostumbrado a este tipo de actividad, será incómodo, y va a preferir volver a sus rutinas de siempre, ver películas, ponerse a leer o lo que fuera que te distraiga.

Está comprobado científicamente que ejercitando 10 minutos al día, en el plazo de pocas semanas se verán cambios significativos en las personas que no solo se reflejan porque se sienten mejor y comienzan a disfrutar de la práctica sino también que en distintos estudios cerebrales que se realizan se observa cómo cambia de colar la zona del cerebro donde antes se registraba mayor tensión.

En mi canal de Youtube @camina.andando de lunes a viernes compartimos a las 7 de la mañana esos 10 minutos diarios para que todos podamos ir practicando en comunidad y obtener los grandes beneficios de meditar. Ya sea para liderar tu vida o para liderar un equipo, te aseguro los cambios te sorprenderán. Te animo a unirte y a que practiquemos juntos esta técnica.

Vanesa Biasoli