En una esquina del ring se encuentra Javier Milei, de 52 años, quien se describe a sí mismo como ex entrenador de sexo tántrico, anarcocapitalista outsider y favorito en las próximas elecciones presidenciales de Argentina. En el otro, su compatriota el Papa Francisco, de 86 años, campeón mundial de los pobres, repetidamente ridiculizado por el probable próximo presidente de Argentina como “un jodido comunista” y “el representante del mal en la Tierra” por promover la doctrina de la “justicia social” para ayudar a los desfavorecidos.
Así describe el periódico británico The Guardian la puja entre el populista de derecha y el pontífice “comunista”, un que se convertirá en guerra su el primero gana las elecciones. Milei, un desconocido político hasta 2020, se ha comprometido a librar una “batalla cultural” para transformar a Argentina en un paraíso libertario donde la eficiencia capitalista reemplace la asistencia social, y los impuestos se reduzcan al mínimo.
El Papa
Desde Roma, el Papa Francisco ha expresado su grave preocupación por el surgimiento de “políticas tan insensibles. “La extrema derecha siempre se reconstruye, es el triunfo del egoísmo sobre el comunitarismo”, manifestó en una entrevista televisiva en marzo, cuando le preguntaron sobre las próximas elecciones en Argentina. En palabras que parecían referirse a Milei, el Papa añadió: “Me aterrorizan los salvadores de la nación sin una historia de partido político”.
“La doctrina de justicia social del Papa es sinónimo de robo para el partido La libertad Avanza de Milei, porque depende de los ingresos fiscales”, repasó The Guarduian. “Jesús no pagó impuestos”, tuiteó una vez Milei, etiquetando la cuenta oficial del Papa.
Adversarios
Milei ha trolleado a Francisco con repetitivos tuits, llamándolo “imbécil comunista”, “pedazo de mierda” y acusando al pontífice de “predicar el comunismo al mundo”. Según Juan Grabois, el ex candidato presidencial de Unión por la Patria cercano al pontífice, Milei es un “falso profeta” que apalancó su ascenso en la terrible crisis económica de Argentina. “Con una inflación superior al 115% más una caída del 25% en el poder adquisitivo de los trabajadores informales en los últimos siete años, los votantes tendrían que poseer una madurez política imposible para votar nuevamente por aquellos que les han fallado tan completamente”, explicó el referente social al Observer de The Guardian.
“Los votantes desencantados tanto con Juntos por el Cambio, como con el peronismo en ejercicio, han migrado en masa hacia el recién llegado Milei”, destaca el periódico britpanico. “La música del flautista suena dulce para aquellos que han perdido toda esperanza. Pero no tiene sentido culpar a los votantes ni al propio flautista, tenemos que abordar los errores cometidos por quienes tenemos una concepción humanista de la política”, afirmó Grabois.
Dialéctica
En su discurso de victoria después de las primarias del 13 de agosto, Milei, con el pelo alborotado, prometió la desaparición de los beneficios gubernamentales porque están “basados en esa atrocidad que dice que donde hay una necesidad, nace un derecho, su máximo expresión siendo esa aberración llamada justicia social”.
“Humanista no es un término que pueda aplicarse a la economía de Milei. Además de legalizar la venta de órganos corporales, su puntiaguda agenda propone dinamitar el Banco Central, abolir el sistema de educación pública gratuita de Argentina y desmantelar los servicios públicos de salud gratuitos. Milei también está entrando sin miedo en territorio anti-woke diciendo que restablecerá la prohibición del aborto, legalizada en 2020, cerrará el ministerio de la mujer, género y diversidad, así como los ministerios de ciencia”, repasó The Guardian.
Milei es consciente de la probabilidad de que su prédica engendre protestas callejeras violentas. “Voy a meter presos a los líderes de los que tiran piedras y si rodean la Casa Rosada me van a tener que sacar muerto”, remarcó recientemente.
Visita
El Papa Francisco había confirmado hace un mes que su visita a la Argentina “está en programa” una vez pasadas las elecciones presidenciales. “En estos momentos solo pienso en Argentina… y quizás Uruguay. Ya hubo varios intentos antes, pero las elecciones frustraron la visita”, declaró el Santo Padre.
Francisco, recientemente operado de una hernia, está pensando ya en el epílogo de su papado. Y la vista a nuestro país es una deuda. Una que podría quedar sin saldar si Milei gana las elecciones. Aunque en el Vaticano no descartan que el viaje se concrete de todos modos, con presencia en distintos puntos del interior, en un desafío al libertario.
“¿Qué pasa si un país inestable es gobernado por un líder inestable?”, se preguntó el periodista de NOTICIAS Juan González, autor de la biografía de Milei "El Loco", en díalogo con el Observer. "Me preocupa que realmente intente imponer sus impracticables teorías económicas que devastarán aún más la economía y provocarán violentos disturbios sociales". Preocupaciones que Francisco comparte.
Comentarios