Una encuesta reciente de Opina Argentina, la consultora de Facundo Nejamkis marca que la imagen del presidente Alberto Fernández sigue en caída. Supo ubicarse en el 80% de positividad en abril del año pasado. Hoy ese número baja al 43%. Y trepa su imagen negativa ubicándose en el 55%.
Ese número crece hasta el 61 % cuando se le pregunta al sector más rico de la sociedad, y se ubica en el 26% en la base de la pirámide, lo que permitiría pensar en que el "Plan platita" podría tener efecto a la hora de dar vuelta el resultado de las PASO.
Sin embargo, solo 27% de los encuestados ve como positivos los cambios en el gabinete de Alberto Fernández. Los porcentajes negativos alcanzan el 60% en la clase alta. Mientras mantienen el 37% en las clases bajas, pero aquí es determinante la mirada de la clase media, que desaprueba el nuevo gabinete en un 51%.
De igual modo decrece la imagen positiva de Cristina Kirchner, qué en medio de la pandemia logró revertir la tendencia y tener más aceptación que rechazo. Hoy esa brecha se amplia y la imagen negativa crece hasta el 60% su valor más alto en año y medio.
Y dichos guarismos se repiten casi en espejo para el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, que ubica su rechazo en el 59% y su aprobación en el 38%.
Está desaprobación arrastra finalmente la imagen de la candidata a diputada por la provincia de Buenos Aires, Victoria Tolosa Paz, quién amplía su rechazo hasta el 47%. Pero también crece su aprobación del 26 al 32% desde agosto, mientras baja a la mitad, de 40 a 21% quiénes no tenían una posición tomada respecto de la candidata del Frente de Todos.
En tanto, su rival en las legislativas bonaerenses, Diego "El Colo" Santili sube en aprobación del 41 al 48% desde agosto, mientras el rechazo al candidato de la alianza opositora Juntos evoluciona del 29 al 33%. Con lo que la conversión de los más 10 puntos de indecisos tras las PASO se reflejan en 6 a favor y 4 en contra: el 63% de los que no había tomado posición antes, hoy lo aprueba, mientras que el 68% pasó a desaprobar a Tolosa Paz.
Con casi 2 años de gobierno del Frente de Todos, el 48% de los votantes creen que la culpa de la actual crisis económica, principal preocupación entre los argentinos, es responsabilidad de la actual gestión.
Así se ve una marcada evolución desde julio del 2020, cuando el 29% creía que los males eran responsabilidad de Alberto Fernández, y en un 46% de Mauricio Macri: hoy un 31% se lo atribuye a Mauricio Macri, y un 15% a la pandemia de Covid-19.
El 54% de los mayores de 50 años responsabilizan al presidente, pero tan solo el 38% de los votantes entre 18 y 29 años. En sentido inverso esa franja cree que la pandemia, en un 23%, es responsable de la crisis, mientras que solo el 8% de los mayores de 50 años se lo atribuyen al Covid-19.
Si se analiza desagregado por nivel socioeconómico, el 62% de la gente de clase media alta responsabiliza Alberto Fernández, mientras que en un nivel socioeconómico bajo, la responsabilidad se le atribuye a Mauricio Macri en un 37%.
Crece la proporción de argentinos que creen que ni el Frente de Todos ni la oposición de Juntos por el Cambio son aptos para resolver la crisis económica post Covid: casi un 26% piensa que debería existir una tercera vía.
Del mismo modo, pierde eficacia el gobierno: hace un año y medio, un 50% creía que Alberto Fernández podría revertir la crisis. Hoy ese porcentaje se situó en el 33%. De manera inversa, solo un 16% creía que Juntos por el Cambio podría volver a ser una opción de gobierno. Y hoy ese porcentaje trepa hasta el 34%.
La pandemia ya no es el principal problema que el gobierno debería solucionar, cómo marcaban las encuestas en febrero de este año. El covid-19 preocupa apenas al 3% de los encuestados, y la principal preocupación, cómo lo fue durante buena parte del año, es la inflación, seguida por la desocupación, que hace más de un año ocupaba apenas el 6% del interés público, y hoy aqueja hasta al 25%.
Comentarios