Dispone de una caja de 107 mil millones de pesos manejada por el asesor estrella Santiago Caputo. Tiene gastos reservados de los que no rinde cuentas y, según su nuevo plan de inteligencia, puede espiar a periodistas y opositores. En Noticias de esta semana te vamos a contar La Side libertaria.
En los dos años que lleva el gobierno de Javier Milei, ya cambiaron dos veces de secretario de Inteligencia. El nuevo “Señor 5” tiene un perfil insólito para un espía: se saca selfies en redes sociales y publica datos privados de su familia. El anterior jefe Sergio Neiffert había renunciado, después de algunas escenas de resistencia en calzoncillos, por discrepancias con Caputo y su intento de ofrendar su lealtad a Karina, una traición que no se tolera en ningún nivel del Gobierno.
Milei volvió a poner a la SIDE en un lugar de privilegio después de haber caído en el desprestigio de la época kirchnerista. Multiplicó las partidas del organismo de inteligencia y habilitó un nuevo plan, que de manera subrepticia, permite espiar a periodistas y opositores. En diciembre, el Gobierno aumentó el presupuesto de la SIDE en 26 mil millones de pesos, entre los que figuran algunos gastos realmente escandalosos: 1000 millones de pesos para gomas, ropa del personal y utensilios de cocina. La SIDE, una caja negra que nadie controla.
También te vamos a contar un tema muy preocupante. En poco menos de una semana, hubo cuatro suicidios de integrantes de las Fuezas Armadas. Esta situación alarmante desnudó el drama de la salud mental en las fuerzas de seguridad. Esto se puede explicar por un combo muy dificil de enfrentar: una obra social quebrada que no puede dar contención psicológica a los soldados y la crisis económica y habitacional por la que también pasan.
El boom de los cruceros. Por qué hoy las vacaciones en altamar son una de las opciones más buscada por los turistas y cómo influye el factor free shop en la elección de este servicio premium.
También, vidrieras top: el regreso de las marcas de lujo como Victoria's Secret a los shopping porteños después de años de ausencia.














Comentarios