*****. Semanas atrás elogiamos efusivamente la interpretación del prodigioso actor español Roberto Álamo (ganador dos veces del Premio Goya), como admirable protagonista de “Urtain”; espectáculo sobre la malograda vida del homónimo boxeador ibérico. Ese montaje está disponible en Teatroteca, la plataforma online gratuita con grabaciones en video de obras significativas de la historia teatral hispana.
Allí mismo se lo puede ver junto a otro notable colega, su compatriota Sergio Peris-Mencheta (se luce en el film “El capitán Trueno y el Santo Grial”) en “Lluvia constante”, primera pieza de una trilogía sobre policías de Chicago, del dramaturgo norteamericano Keith Huff. Estos dos auténticos animales del escenario, a las órdenes del autor español, guionista y director de teatro y cine David Serrano, ofrecieron una exitosa versión española en Madrid, durante el otoño de 2014, y posteriormente, realizaron una gira por todos los rincones del territorio ibérico.
“A Steady Rain”, tal su título original, llegó a Broadway en 2010 y batió el récord de espectadores semanales para una obra de teatro no musical, protagonizada por Hugh Jackman y Daniel Craig. En Buenos Aires se ofreció al año siguiente, con Rodrigo de la Serna y Joaquín Furriel dirigidos por Javier Daulte, en un elogiado montaje.
La trama se enfoca en dos policías que ofrecen descripciones contrastantes a los interrogadores de asuntos internos, sobre sus desgarradoras experiencias personales. Desde el principio, los personajes se dirigen al público, lo interpelan, y rivalizan para imponer sus respectivas verdades. Alternan diálogos y monólogos, entran y salen de recuerdos, pero fundamentalmente nos hacen imaginar lo sucedido y sentir, por su cercanía e inmenso talento, la violencia de sus emociones, tan constante como la lluvia del título. El texto es un torrente de poesía callejera, que solo puede ser enunciada por dos fuerzas de la naturaleza con un porte interpretativo deslumbrante. Ambos impactan, emocionan y convencen sin excesos, con sobresaliente convicción y una conmovedora entrega.
El diseño visual, con escenografía de Elisa Sanz e iluminación de Juan Gómez Cornejo, brinda imágenes poderosas y bellísimas en una propuesta insoslayable.
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