La multifacética Remedios Varo (España, 1908-México, 1963) se exilió en México en 1942; una entre los extraordinarios artistas e intelectuales que llegaron a América escapando del nazifascismo. ¿Qué pensaría Remedios Varo de estos tiempos, aún con su desbordante imaginación, extravagante personalidad y lecturas futuristas? Desde la sala del museo, el artista Leopoldo Estol le cuenta a Varo por qué su muestra no tiene público.
Figura del arte fantástico latinoamericano, abandonó el automatismo surrealista, que practicó en Europa, por procesos “técnicos muy controlados”. Las obras reflejan su talento y su conocimiento de las ciencias naturales y ocultas (magia, alquimia, astrología), salpimentadas por los escritos de G. I. Gurdjieff y Peter Ouspensky y sus estudios sobre psicoanálisis.
“Constelaciones”, curada por Victoria Giraudo, de MALBA, y Carlos A. Molina, del Museo de Arte Moderno de México, gira en torno a su vida y obra. Se exhiben cinco núcleos temáticos: afinidades (s)electivas, signos, bestiario, maquinaciones, Eros/Thánatos, y un apéndice documental llamado “Las manos de Remedios”. Son 35 pinturas, 11 dibujos y 60 bocetos realizados entre 1938 y 1963, centrados, mayormente, en los trabajos efectuados en tierra azteca.
Son excelentes los cinco encuentros virtuales de la mano de Diego Murphy, educador del museo, la visita con perspectiva de género conducida por Fiorella Talamo y la aproximación de Verónica Rossi a archivos y documentos de la exhibición.
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