*** Chica y chico se encuentran en un bucle temporal: ella la pasa bomba, él, obviamente, no. Ambos han de aprender de la belleza del mundo y de ellos mismos para salir.
O sea, otra variación de una película perfecta (Hechizo del tiempo, siempre obra maestra) en versión romance teen.
¿Funciona? Y sí, ellos son simpáticos, aunque las situaciones son de una liviandad que nos obliga a pensar en ocasiones para qué seguimos mirando. Pero por rara química, llegamos al final.
Un relato creado en nombre de la industria.
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