Perder los sponsoreo de marcas, quedar expuesto ante miles de personas, ensuciar su imagen y reputación, dar un giro abrupto en el éxito de sus carreras, y… perder trabajos o negocios de mucho dinero, son algunos de los aspectos que cualquier deportista, artista, influencer, o personalidad famosa puede experimentar, si no se tiene una estrategia de comunicación acertada. Martín Bal es periodista y desde hace más de 20 años se dedica a la prensa y la comunicación. Es fundador de la consultora “GMB Press”, que cuenta con clientes en toda Latinoamérica. Si bien en la universidad no le enseñaron a hacer prensa, siempre tuvo pasión por la industria. Sostiene que “Prensa debe tener ADN periodístico”.
¿Se puede replicar el trabajo de prensa en artistas, deportistas o influencers en una compañía?
100%, el trabajo que hago hace más de 20 años con empresas, es muy similar en toda persona que tienen relación con medios y son una marca, dándoles herramientas para acompañarlos en generar más negocios. Saber manejar los mensajes clave, el mapa de medios y vínculo con los sponsors.
¿De qué se trata el concepto que creó?
A través de tecnologías avanzadas (que miden el minuto a minuto), nuestro sistema es innovador porque logramos adaptar a una empresa, ya sea una automotriz o un banco, las mismas metodologías que a personas que se relacionan con medios y periodistas. Este sistema 360 hizo un giro en la industria, porque replica un nuevo método que centraliza el trabajo de prensa en varios segmentos. Antes, un agente de prensa no contaba con tantos recursos para generar contenidos, segmentar información y lograr publicaciones en medios.
Hoy, con el sistema que implementamos, se puede replicar una política de comunicación en personas con exposición mediática, con métodos idénticos a los aplicados en empresas. Se trata de realizar un mapeo de antecedentes, adónde salió en medios, qué relación tuvo con periodistas, cómo fueron esas experiencias, cuál es su historia, como una “Radiografía” de marca.
Luego, pasamos a armar la estrategia y vinculamos como si fuera un CRM, distintas verticales de comunicación, que antes “jugaban” separadas y hoy se combinan: mensajes clave, mapa de medios, prevención de crisis, publicidad y redes sociales.
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