La carrera electoral llegó a su fin y dejó sorpresas, anécdotas y también mucho dinero en el camino. Según los registros oficiales de los aportes de campaña, La Libertad Avanza, de Javier Milei, juntó en todo el país $ 199.656.613, y Unión Por la Patria de Sergio Massa recaudó $ 377.125.175.
León. Las empresas que más aportaron a la campaña de Milei están todas en el mismo lugar: Florida 537, en el centro de Buenos Aires. Son Franquimar SA, Smart Commerce SA y Dulkord Company, y juntas suman 96 millones de pesos. Venden equipos informáticos, tecnología y computadoras para gamers. Ninguna de esas compañías tiene un nombre consolidado en el rubro, pero plata no les falta. Las tres empesas con domicilio común y nombres que se repiten en sus directorios solo aportaron en la etapa de las PASO, es decir que son seguidores de la primera hora del líder libertario.
Para esta etapa del ballotage apareció un nuevo aportante. Nada más y nada menos que Paolo Rocca, el CEO del Grupo Techint. A través de la constructora Inurban, Rocca registró un aporte por 20 millones de pesos el lunes 13 de noviembre, casi sobre el filo de las elecciones. Plata fresca para la fiscalización. Rocca en su juventud milanesa fue militante del partido de izquierda Lotta Continua. ¿Qué dirán sus viejos compañeros de militancia de este apoyo a un liberal? Él podrá explicarlo como pragmatismo empresario.
El mayor aportante individual –persona física– para Milei fue Sebastián Braun, de la familia dueña de Supermercados La Anónima y del terreno donde está montado el parador La Huella en Punta del Este. El segundo fue el del consultor Fernando Cerimedo, conocido por naturalizar el uso de trolls en las campañas digitales, que trabaja para Milei e hizo aportes por 28 millones de pesos. Todos los aportes se hicieron después de las PASO, entre el 23 y el 31 de agosto.
En la tropa de Milei, dos individuos se destacan por la confianza depositada en ellos: Carlos Kikuchi, el jefe de campaña del líder libertario, y Nicolás Posse, un amigo que desempeña el rol de coordinador de los equipos técnicos y que, como ya fue anunciado por el propio Milei en el programa de radio de Marcelo Longobardi, será el jefe de Gabinete en caso de ganar la elección. Ambos, cada uno con su enfoque distintivo, se dedicaron a la tarea de obtener los recursos financieros necesarios para respaldar las giras, los afiches, las encuestas, los consultores y todos los servicios requeridos en el contexto electoral, abarcando desde el montaje de escenarios hasta la impresión de panfletos.
En diciembre del 2022, Posse fundó la asociación civil Instituto para el Crecimiento, que opera como un think tank que suministra equipos para un eventual gobierno de Milei. Esta entidad también sirve como un mecanismo de recaudación de fondos, canalizando aportes destinados a respaldar al líder libertario.
Tigre. La campaña presidencial de Massa recibió aportes de empresarios vinculados a la Aduana, la logística y el fútbol.
El director de la Aduana, Guillermo Michel, y el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, fueron los principales referentes de la recaudación. La Cámara de Depósitos Fiscales Privados, una entidad que representa a los operadores aduaneros, aportó 19,5 millones de pesos. Juan Pablo Damonte, un despachante de Aduana, aportó 15 millones.
La mayor aportante fue la empresa de logística Sixtar Courier, propiedad de Fernanda Kolln y Matías Yanguas, según el Boletín Oficial, con 20 millones de pesos. Esta empresa había aportado 5 millones para las PASO, pero para el balotaje triplicó la apuesta y sumó otros 15 millones.
El aportante individual más importante fue Rodolfo Serrano, dueño de la empresa de logística Fleet Group, con base en El Talar, partido de Tigre. Serrano aportó 20 millones.
El ciudadano chino Hang Lin, dueño de la empresa de venta mayorista de productos de blanquería De Once, aportó 15 millones.
El empresario Francisco de Narváez, dueño de la cadena de supermercados Chango Más, aportó 10 millones. En el búnker de Unión por la Patria se afirma que De Narváez también habría colaborado con la contratación de la consultora brasileña que se sumó al equipo de campaña para reforzar la estrategia digital y también trabajar en el debate. A los brasileños le adjudican haber sido los promotores de que Massa le haga preguntas “por sí o por nó” a Milei. El empresario José Luis Manzano, amigo de Massa, también habría colaborado con la contratación del equipo brasileño.
Entre los funcionarios que más aportaron está Matías Lammens con 200 mil pesos, y le siguen la secretaria de Energía, Flavia Royón, y la presidenta del Banco Nación, Silvina Batakis, con 150 mil cada una. Luego, en la franja de los 100 mil pesos, están los ministros del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, de Justicia, Martín Soria, de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y de Defensa, Jorge Taiana. También están el canciller Santiago Cafiero, el secretario de Comercio, Matías Tombolini, la presidenta de Radio y Televisión Argentina, Rosario Lufrano, el director de la Aduana, Guillermo Michel, el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, el subsecretario de Justicia, Juan Martín Mena, la jefa de asesores, Mercedes Marcó del Pont, y la secretaria de Cambio Climático, Cecilia Nicolini. Todos pusieron plata o, al menos, su nombre.
Un poco más abajo en la lista aparece otro empresario de perfil alto: Gustavo Grobocopatel, con un tímido aporte de 50 mil pesos. Una clara prueba de que la sequía provocada por el fenómeno de La Niña hizo estragos.
Al cierre de esta edición, en la web aportantes.electoral.gob.ar seguían cargándose los aportes de campaña para la segunda vuelta electoral y lo mismo continará ocuriendo en los días posteriores, pero solo a modo de rendición de cuentas. El dinero ya fue usado.
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