La interna más relevante dentro del PRO es la que tiene como protagonistas a Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. Ambos bandos son caracterizados como halcones y palomas. Los halcones son los más duros y están representados por Bullrich, y las palomas se muestran más moderadas y se encolumnan tras Rodríguez Larreta.
En este momento, ambos compiten como precandidatos para las presidenciales del 2023 y tienen lugares relevantes. Bullrich es presidenta del PRO a nivel nacional y Rodríguez Larreta ocupa el cargo de jefe de Gobierno porteño.
Pero hay un punto de encuentro, algo que los une, más allá de ese objetivo presidencial común. Se trata de una pareja que trabaja para los dos. Es el matrimonio entre Julia Pomares y Alberto Föhrig. Ella es la jefa de asesores del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Trabaja codo a codo con Rodríguez Larreta en la estrategia general del gobierno y además es la coordinadora de los equipos técnicos de la campaña 2023. Él es el asesor principal de Patricia Bullrich y también coordina la campaña presidencial de la ex ministra de Seguridad. El nivel de involucramiento de Föhrig es tal que es uno de los acompañantes de Bullrich a la gira que hará por Estados Unidos la próxima semana, donde visitará empresas en Silicon Valley, en San Francisco, inversores en Nueva York con activos en Argentina, funcionarios republicanos y demócratas, en Washington, y además participará de un seminario con estudiantes en Chicago. Además se reunirán con el Premio Nobel en Economía especializado en Inflación Thomas Sargent.
Amor. Pomares y Föhrig se conocieron en la Casa Rosada. Fue durante el gobierno de la alianza, en el despacho de Federico Storani. Ella era asesora del ministro y él, su jefe de Gabinete. Es decir que son una pareja que nació al calor de la política. Luego de aquella experiencia en la gestión pública, ambos se fueron a estudiar al exterior. Ella a Londres y él a Oxford, donde hicieron estudios de posgrado. Con el paso del tiempo tuvieron dos hijos y comenzaron a desarrollar su vida académica en Buenos Aires. Pomares llegó a ser directora ejecutiva del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) y Föhrig profundizó su formación académica especializándose en temáticas de seguridad y narcotráfico. Durante el gobierno de Mauricio Macri, Föhrig trabajó con Patricia Bullrich como secretario de Coordinación Planeamiento y Formación y hoy además participa en el Instituto de Estudios Estratégicos en Seguridad, la fundación de Bullrich.
Pomares, entre sus tareas, tiene la articulación entre las fundaciones que sostienen a los integrantes de Juntos Por el Cambio. Ellas son Pensar (PRO), Alem (UCR), el Instituto Hannah Arendt (Coalición Cívica) y Encuentro Federal (el peronismo PRO). En las últimas semanas estos think tanks fueron noticia por diferentes documentos que publicaron como las reglas de buenas prácticas de cara a las elecciones del 2023, para evitar golpes bajos en la campaña.
Pomares y Föhrig son conscientes de que en su casa confluye la interna del PRO y lo asumen con naturalidad. Es el trabajo que hoy les toca y tratan de no personalizar los conflictos, al final todo se trata de política. Incluso los mismos protagonistas les han hecho bromas sobre cómo serán las discusiones en su casa, como si fuera una suerte de “Señor y Señora Smith”, la película protagonizada por Brad Pitt y Angelina Jolie.
En Estados Unidos existió el caso de una pareja con intereses políticos cruzados: fue el matrimonio entre James Carville y Mary Matalin. Él asesoraba a los demócratas y ella a los republicanos. Carville es conocido en la Argentina porque a fines de los ‘90 fue asesor de Eduardo Duhalde, cuando era gobernador bonaerense.
Hoy la interna entre Larreta y Bullrich atraviesa una etapa tranquila, pero habrá qué ver si levanta temperatura a medida que se acerca la etapa de definiciones. Y habrá que ver cómo repercute eso en el matrimonio de Pomares y Föhrig.
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