Periodista y editor, Pablo Avelluto es el hombre clave detrás del nuevo libro de Mauricio Macri, “Para qué”. No sólo lo editó, sino que ayudó en su confección. Saltó al ejercicio político y al macrismo en el 2012, cuando dejó la conducción del grupo Random House Mondadori. Y durante la presidencia iniciada en el 2015 estuvo a cargo del Ministerio de Cultura, una gestión criticada por sus recortes presupuestarios y de personal, pero alineada con los designios macristas, que lo convirtieron de a poco en hombre del riñón presidencial.
Se ganó ese lugar cuando Mauricio Macri vivía sus horas más oscuras: derrotado en el 2019 en las PASO por Alberto Fernández, el presidente se hundía en un berrinche, responsabilizando al electorado por el salto devaluatorio. No había aparentemente vuelta atrás, cuando Avelluto le contó el cuento de la épica de las caravanas menemistas en 1989: el Menemóvil acabó relegando a Antonio Cafiero, el candidato mejor rankeado en la interna del peronismo, y luego al radical Eduardo Angeloz en las presidenciales.
Avelluto le inspiró a Macri la mística del regreso, que se tradujo en la “Caravana del Cambio” que le permitió al ex presidente crecer diez puntos en la segunda vuelta. Un vender cara la derrota que a Macri le significó mucho más: lo reconectó con sus ideas de base (bastante parecidas a las del neoliberalismo menemista que hoy se exponen en su nuevo libro), y con la calle, tras cuatro años de encierro en su círculo íntimo. Y le permitió finalmente ilusionarse con un “segundo tiempo”, versión PRO del latiguillo kirchnerista “vamos a volver”.
Si “Primer Tiempo”, el libro que Macri presentó en marzo del 2021 -también editado por Avelluto-, era una pasada en limpio de su presidencia con cuotas de autocrítica, “Para qué” se plantea como hoja de ruta para una eventual vuelta al poder. Recopila sus ponencias y cátedras universitarias del último tramo, y los intercambios con dirigentes varios. En esas páginas propone cambios de lo que hizo en su gobierno: descarta el gradualismo (“fue producto de nuestra debilidad y no de nuestra vocación”), y apunta a un recorte del Estado y el gasto social, desechando la “intermediación parasitaria” e impulsando reformas de fondo.
“Lo que no se hace de entrada es muy probable que no se pueda hacer nunca”, escribe Macri, que pregona que no hay plan de mil días, sino de cien, y uno intensivo de diez. Terapia de shock.
“Hay un dato que señala Mauricio en su libro, que es el cambio de la sociedad. La misma sociedad que en el 2015 todavía tenía reparos frente a un rumbo de estas características, incluso entre quienes votaron a Macri, empezó a cambiar por varias razones. Una de ellas fue el fracaso de la experiencia kirchnerista posterior, hoy estamos peor, en todos los aspectos, que cuando estábamos mal a finales del 2019”, explica Avelluto.
“La sociedad fue mutando y transformándose sobre ideas que en un momento eran tabú. Hoy con el diario económico liberal, la idea de mayor libertad, de menos regulaciones, de disminuir la carga impositiva y al mismo tiempo mejorar la calidad de los servicios que presta el Estado, cuenta con un mayor apoyo de parte de los argentinos. Ese elemento, y un programa claro de gobierno, es lo que va a garantizar que los cambios sean profundos y duraderos”, enfatiza el ex ministro de Cultura y curador de “Para qué”.
En tal sentido, Avelluto explica que Macri entendió que su error fue concentrarse en “la cuestión republicana” y no impulsar el “debate interno en cuanto al rumbo económico”. Y reconoce que las del ex presidente “no son ideas nuevas, sino que están en el debate político argentino desde hace mucho tiempo”, pero justamente por ello son una “deuda de la política hacia los argentinos”.
“Noté cuando editaba el libro que el recorrido que Macri empezaba a hacer iba más hacia su propia experiencia, sus aprendizajes personales, sus decisiones, los puntos de quiebre a lo largo de su vida. Se fue volviendo más profundo, lleno de ejemplos, historias y anécdotas”, cuenta Avelluto.
“Para qué” es para Macri y su curador un dejar atrás la “declaración de buenas intenciones”. “Hubo un núcleo de coincidencias básicas con los gobernadores que apuntaban a esta misma dirección, y después tuvimos toneladas de piedras en el Congreso para sancionar la reforma previsional”, resume el editor sobre los acuerdos fallidos.
El Macri en versión Avelluto que asoma en “Para qué” juega con la idea de volver a pensar la política como un outsider. “Siempre Mauricio tuvo una sensación de no ser del todo parte del sistema”, concluye.
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