Saturday 27 de April, 2024

COSTUMBRES | 21-11-2023 06:21

Cómo la industria del vino argentino mejora el medio ambiente

Varias bodegas vitivinícolas locales eligen certificarse como Empresa B para mejorar su impacto económico, social y ambiental.

“Sabemos que esta es la mejor manera de generar una red,  un ecosistema que asegure un compromiso no solo desde lo que tiene que ver a nivel de producción de nuestros vinos, sino que en nuestra área de enoturismo tambien. Nosotros siempre elaboramos vino argentino orgánico de calidad, con un buen precio, y hemos sido reconocidos en el mundo por esas cualidades”, detalló sobre Sistema B, Anne Bousquet, Presidenta  de  bodegas Domaine Bousquet.

 Sistema B es una organización sin fines de lucro que estimula que las organizaciones de la sociedad civil, los movimientos sociales, los ciudadanos y la responsabilidad social de los negocios, deben trabajar juntos con otros actores económicos. Esta asociación promueve a las empresas, impulsando la creación de impacto positivo en tres dimensiones: social, ambiental y económico.

La propuesta se remonta a 2012, Juan Pablo Larenas (Chile), Gonzalo Muñoz (Chile), María Emilia Correa (Colombia) y Pedro Tarak (Argentina) se unieron con el propósito de crear un ecosistema de empresas y actores económicos en la región que, uniendo fuerzas y capacidades, pudieran  dar solución a los problemas sociales y ambientales más urgentes.

Sistema B

A partir de este objetivo conjunto, decidieron traer el Movimiento B a la región, iniciativa creada en el 2006 por B Lab, una organización internacional con origen en EE.UU., que lleva a cabo una economía inclusiva, equitativa y regenerativa, a través de la certificación de Empresas B.

Así, fundaron Sistema B con el propósito de extender la certificación y este ecosistema de triple impacto a toda América Latina y Caribe. La organización tiene como misión construir estos ecosistemas favorables para un mercado que resuelva problemas ambientales, trabajando con todos los actores del mercado: empresas, inversionistas y  académicos.

Para muchos es una herramienta integral para conocer, medir y gestionar el desempeño social y ambiental de las empresas, analizando 5 áreas de impacto: gobernanza, trabajadores, clientes, comunidad y medio ambiente. Se desarrolla por medio de una evaluación online, gratuita y confidencial que se adapta a cada tipo de empresa según industria, tamaño y mercado.  Este tipo de certificcion tuvo una incidencia trascendental en la industria del vino local.

bodega araujo

“Ser una empresa B impacta de manera significativa en la calidad y en el proceso de producción. Al adoptar un enfoque de medición y trazabilidad en todas las áreas de nuestra operación, nos desafía a mantener altos estándares y nos impulsa a buscar constantemente mejoras en nuestros procesos, insumos y prácticas. Aunque en ocasiones puede resultar más costoso debido a la necesidad de mantener una mayor precisión en diversas áreas, esta certificación tiene un impacto netamente positivo en nuestros procesos, ya que nos obliga a mantener un compromiso constante con la excelencia ”, señaló Carlos Federico Araujo, Director de Bodega Araujo.

“En los últimos años se ejecutaron varias acciones de impacto, como la medición del recurso hídrico y construcción de una represa para riego controlado, la continua operación de una planta de tratamiento de efluentes, desarrollo de políticas de gestión de residuos, reciclaje, compostaje, forestación, biodiversidad y promoción del consumo responsable. Por otro lado, la educación es un eje central, ya que la bodega implementa constantemente programas y convenios de inserción laboral junto al Municipio y otras entidades, donde se fomenta el crecimiento profesional del personal técnico, con resultados muy alentadores”, explicó Sofía Pescarmona, CEO de bodega  Lagarde.

bodega araujo

Para certificar B, una empresa debe superar 80 puntos de 200 en la Evaluación de Impacto  y atravesar un proceso que valide la información, llevado adelante por B Lab, el único ente a nivel global que otorga la certificación de Empresa B.  La instancia evaluatoria de una empresa vitivinícola, comienza con la medición de su impacto.”Es por eso que desde Sistema B acompañamos a las empresas, como pueden ser las bodegas, en la medición y gestión de su impacto, a través de distintas propuestas y programas”, remarcó Marina Arias, Directora Ejecutiva de Sistema B Argentina.

En caso de obtener el sello B, para mantener la certificación, la empresa es evaluada cada tres años a partir de los estándares de la herramienta, que van creciendo acorde a las urgencias planetarias. Después de esos tres años la empresa puede solicitar hacer el camino de re-certificación donde se mide nuevamente. “Este conjunto de prácticas busca lograr producciones rentables de uvas y vinos, con máxima calidad enológica y seguridad alimentaria, minimizando el uso de agroquímicos en base al cuidado de su medio ambiente”, sostiene Jorge  Cahiza, CEO Penedo Borges Bodega Boutique.

“Para que un viñedo sea sustentable, su suelo debe ser un ámbito lleno de vida, con la mayor diversidad posible de especies viviendo sobre su superficie (plantas de vid, plantas naturales y malezas no agresivas) y también debajo de ella (lombrices y otros pequeños animales, hongos y microorganismos diversos). Cuanto mayor sea esa biomasa, mayor será la cantidad de materia orgánica producida y mejor su aprovechamiento por parte del cultivo”, agregó Cahiza.

bodega araujo

 La viticultura sustentable, aplica los resultados obtenidos por la investigación científica, para optimizar el manejo del riego, de la fertilidad natural del suelo, de los enemigos naturales y de las plagas, tratando de minimizar el uso de insumos y también la huella de carbono dejada por la actividad. “En principio no tiene un impacto directo en los costos ni en el precio final del producto”, expresó Fernando López de Vivero San Nicolás Vides.

Según datos estadisticos, proporcionados por Sistema B,  actualmente, son más de 7.469 Empresas B en 79 países alrededor del mundo. En Latinoamérica y el Caribe, la certificación está presente en 19 países con un total de 1.096 Empresas B. “En Argentina, ya tenemos 209 Empresas B certificadas localmente, de las cuales 7 responden directamente a la industria vitivinícola: Bodega Araujo, Bodega Trivento, Dolium Bodega Subterránea, Domaine Bousquet, Lagarde, Penedo Borges,  Vivero San Nicolás Vides”, concluyó Arias.    

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Gustavo Winkler

Gustavo Winkler

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