Los tés medicinales están por todos lados, desde dietéticas a bares, pasando por supermercados. Su consumo ofrece un alivio a la digestión pesada o alteraciones intestinales, pero hay incluso quien recurre a ellas por su supuesto poder curativo de enfermedades más complejas como la diabetes o para bajar el colesterol.
La literatura científica sobre los beneficios de la manzanilla es abundante, y aunque bastantes de esos estudios no son concluyentes, sí sugieren efectos beneficiosos a nivel intestinal. El consumo de esta planta medicinal se remonta a la Antigua Grecia, concretamente por los efectos relajantes de esta sobre el aparato digestivo y como reductora de la acidez estomacal
Según los especialistas del tema, una taza de infusión de manzanilla puede reducir los gases producidos por la digestión pesada. Además, en caso de cólicos abdominales, también los aliviará, en parte, gracias a su efecto relajante sobre la musculatura intestinal. En algunas mujeres se ha visto un mejor control del dolor menstrual gracias a esta infusión.
Los estudios sobre el jengibre son abundantes y con resultados mucho más claros. Esta raíz contiene 400 compuestos distintos y gran cantidad de antioxidantes, antiinflamatorios, propiedades antibacterianas, vitaminas, minerales y fitosteroles. Según expertos, una infusión de jengibre puede ser de gran ayuda a la hora de aliviar náuseas y vómitos leves.
También ayuda a aumentar el vaciado del estómago, por lo que será muy útil en digestiones pesadas ayudando a reducir el dolor abdominal. Las propiedades antibacterianas, por su parte, pueden servir para reducir las bacterias de la boca que causan gingivitis o incluso algunas infecciones intestinales.
En el caso del poleo y la menta, a día de hoy, no se dispone un número relevante de estudios científicos sólidos que confirmen sus propiedades medicinales, pero se sugiere propiedades carminativas y antiespasmódicas. Lo que señalan los estudios es que su infusión podría ser útil para prevenir la formación de gases en el intestino y para facilitar su evacuación, además de para reducir levemente los cólicos intestinales.
La cúrcuma, procedente de la India, ha sido denominado como el ibuprofeno natural. La curcumina, el ingrediente al que se le atribuyen todas las propiedades beneficiosas y curativas, pero, a su vez, es inestable y complicada de estudiar en laboratorio. Por lo que se ha podido investigar a día de hoy, los beneficios que nos aportaría una infusión de cúrcuma no irían más allá de cierto efecto antioxidante.
Más allá de los efectos saludables y médicos, mucho en etapa de investigación, el consumo de esta bebidas como tés o infusión son recomendables, deliciosos y dignos de conocer.
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