Finalmente, tras la larga espera de estos cuatro meses desde la presentación de la nueva reglamentación de la ley 27.350, la misma se publicó en el Boletín Oficial, reconociendo nuestro derecho a acceder a la terapia con cannabis a través del autocultivo, el cultivo para familiares o allegadxs y el cultivo en red.
La nueva reglamentación garantiza también, a través del Estado, la provisión gratuita de cannabis y derivados para quienes tengan cobertura pública exclusiva, así como la cobertura a través de obras sociales y prepagas.
Este derecho conquistado tras muchos años de lucha de organizaciones a lo largo y ancho del país no sólo viene a traer la tranquilidad de no ser criminalizadas por ejercer nuestra autonomía, cultivando nuestra terapia: puede también ser una solución para muchos de los problemas socioeconómicos que nos dejó el neoliberalismo y que nos dejará la pandemia.
Quienes integramos MCA nunca fuimos a pedir permiso: fuimos a pedir reconocimiento. Esta nueva etapa de la 27.350 comienza a reparar la injusticia de la persecución y la estigmatización a la planta que nos trajo calidad de vida a muchísimas personas. Celebramos por ello un Estado que nos acompañe, que nos garantice el acceso a la sustancia por la vía que elijamos, que no nos castigue, ni nos paternalice. Esta reglamentación visibiliza que el saber de nuestra experiencia popular y horizontal vale a la hora de construir futuro.
Por delante queda el largo camino de la implementación: debatir por ejemplo cuáles serán las condiciones de acceso al autocultivo y al cultivo en red, pero estamos convencidas de que la construcción será rica y provechosa y de que tenemos interlocutorxs en la gestión pública que están demostrando que priorizan la búsqueda de consensos.
Para que esta conquista no sea otra vez letra muerta, todes necesitamos asumir la responsabilidad de un rol activo y participativo. Ahora la tarea es de formación de todos los estratos de la esfera pública. En dicha tarea, es fundamental el rol de las organizaciones sociales como MCA, que desde hoy, podremos militar esta causa con una tranquilidad mayor ante la nueva reglamentación que se presenta.
En paralelo, seguimos trabajando por una ley superadora, que regule el acceso al cannabis en todas sus formas, la producción desde el cultivo hasta la venta, impulsando el cambio de paradigma que la planta viene a proponernos: una sociedad diversa, inclusiva, centrada en los cuidados, en la solidaridad y la comunidad.
Creemos que es posible, sabemos que esos principios son los que nos trajeron hasta este momento. Si la planta es libre, todes somos un poco más libres, porque nuestra salud es nuestro derecho.
#MarihuanaParaLaSalud #MiSaludMiDerecho
por Mamá Cultiva Argentina
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