Los museos más extraños y curiosos del mundo

Durante siglos, luego de su surgimiento en el siglo XVIII, en los museos se guardaron sobre todo colecciones (de animales, de plantas, de insectos) que ayudaban a comprender mejor el mundo en el que vivimos. También se crearon museos específicamente dedicados al arte (como El Prado, el Louvre o el Hermitage, entre otros) pero desde hace algunas décadas la categoría de museo parece haberse extendido a otra clase de instituciones más curiosas, raras y definitivamente más atractivas.

Así las cosas, hoy existen museos de lo que se nos ocurra, desde gastronomía hasta magia, así como también existen museos dedicados a la historia del cine, de la ropa, del calzado, de los mapas y mucho más. No debería sorprendernos entonces descubrir museos cada vez más raros, de los cuales a continuación vamos a conocer algunos de los más llamativos.

Museo de la erótica de Barcelona

Si bien se calcula que existen siete museos eróticos de nivel internacional tanto por su originalidad como por lo antiguo de su patrimonio, sin dudas el Museo erótico de la ciudad de Barcelona es uno de esos sitios para visitar y sorprenderse. Ubicado en la famosa Rambla, entre sus cerca de 800 objetos se encuentran desde piezas antiquísimas llegadas desde el Paleolítico hasta penes de madera y de piedra, pasando por un Jardín Erótico en donde siempre se realizan actividades de entretenimiento.

Las visitas a veces tienen como guía a algún imitador de un personaje famoso (Marilyn Monroe, por ejemplo) y el lugar está lleno de detalles francamente sorprendentes, como la colección de videos porno que a principios del siglo XX  guionó y filmó el rey español Alfonso XIII.

Museo Rocsen

Este extraño museo está ubicado en la localidad de Nono, en Córdoba, y sorprende porque en medio de un paisaje completamente agreste aparece de la nada e impacta por su color rosa intenso y su frente decorado con 49 de esculturas de personajes célebres vinculados a la evolución de la Humanidad. Jesucristo aparece en tamaño gigante al lado de Mahatma Ghandi o de Martin Luther King y lo llamativo es que cada una de esas figuras fue creada por quien imaginó y concretó este museo, Juan Santiago Bouchon. Definido por éste como “un museo polifacético”, en sus salas se pueden encontrar desde objetos de la cultura de pueblos originarios como los comechingones hasta escenas de la vida de los criollos, moluscos gigantes, objetos tecnológicos del pasado y mucho más.  

Museo Ripley

Este es sin dudas uno de los museos más famosos, raros y visitados del mundo. Robert L. Ripley era un coleccionista de toda clase de cosas extravagantes (desde esculturas curiosas hasta objetos rituales, pasando por cabezas reducidas, pinturas en miniatura hechas sobre alas de mariposas y mucho más) y hoy todo ese tesoro está reunido en las catorce salas de exhibición del Museo Ripley en México. Hay una réplica en cera del cuerpo del hombre más alto del mundo y también está allí el famoso vestido con el que Marilyn Monroe le cantó el feliz cumpleaños al presidente John Fitzgerald Kennedy.

Museo de las relaciones rotas

Este museo nació con un objetivo bastante loco: ser un lugar adonde las personas pudieran llevar los recuerdos de sus amores terminados. La historia comenzó en 2006 y en Zagreb, Croacia, cuando a alguien se le ocurrió pedirle a la gente que le donara los objetos de los que quisiera deshacerse después de una ruptura. La convocatoria fue un éxito. Tanto, que en 2017 el Museo de las Relaciones Rotas se convirtió en el más visitado del país. En sus salas hay cartas, muñequitos, joyas, anillos y detrás de cada pieza hay un texto que explica la historia de desamor que lo trajo hasta el museo.

Museo Warren de Ocultismo

Con la saga de El Conjuro, el mundo conoció a Ed y Lorraine Warren (el matrimonio Warren) una pareja de psíquicos que en la vida real se encargó de resolver muchos episodios para los que ni la policía ni la ciencia tenían respuesta. Desde posesiones diabólicas hasta fenómenos paranormales, todo lo que se escapaba de lo previsible hacía que las autoridades convocaran a la pareja. Esta – a lo largo de los cerca de 4.000 casos que le tocó resolver- acumuló en su casa toda una colección de objetos “malditos” encerrados en vitrinas y con la advertencia de no tocar ni mirar fijamente nada. Hoy el Museo Warren de Ocultismo, ubicado en Connecticut, tiene entre sus piezas más destacadas a la muñeca Anabelle pero está cerrado. Sin embargo, para la alegría de los fanáticos del terror, se dice que abrirá sus puertas el año que viene y bajo un nuevo nombre: el Museo W.