La frase "Lo viejo funciona" se hizo popular gracias a la serie el "El Eternauta", y refleja la idea de que los trabajadores mayores de 55 años han desarrollado una característica particularmente valiosa en tiempos de incertidumbre.
Lo viejo, en efecto, funciona. Reconocer el valor de la experiencia es clave para construir organizaciones más sólidas y resilientes. Es momento de abrazar la diversidad generacional como un pilar fundamental en la estrategia empresarial.
Esta capacidad para adaptarse (hoy llamada inteligencia adaptativa) les permite surfear a través de ciclos completos los procesos de transformación, les permite servir como pilares de estabilidad emocional durante periodos de cambio acelerado, reduciendo la ansiedad colectiva y facilitando transiciones más fluidas.
La sabiduría como activo estratégico
Los colaboradores mayores de 55 años no solo aportan conocimientos técnicos, sino una comprensión profunda de la dinámica organizacional, las relaciones humanas y la resolución de problemas que solo puede adquirirse con los años.
Anticipar obstáculos
Mantener la calma durante las crisis e incertidumbre. Ofrecer perspectivas matizadas sobre decisiones estratégicas, fundamentadas en décadas de observación
Conservar la memoria, que resulta crucial para evitar repetir errores del pasado.
Estrategias para aprovechar el talento “Plateado”
Crear programas de transferencia de conocimiento estructurados
Establecer equipos deliberadamente intergeneracionales para proyectos estratégicos
Reconocer y celebrar públicamente las contribuciones de la experiencia
Habilidades blandas refinadas
Mientras que los jóvenes profesionales pueden destacar en habilidades técnicas actualizadas, los “plateados” se han perfeccionado durante décadas en las competencias interpersonales que son fundamentales.
El cambio de época que estamos viviendo, ante estos nuevos mindsets (paradigmas, sistemas de creencias, modelos mentales), gestionar la diversidad generacional es clave. Siempre existió la diversidad generacional, los plateados la vivieron, pero la mentalidad duraba más tiempo.
Un liderazgo resignificado o reciclado que se permita analíticamente y dar lugar a las generaciones silver y gold
A manera de conclusión
En un contexto empresarial obsesionado con lo nuevo, las organizaciones verdaderamente visionarias están redescubriendo que "lo viejo sirve" cuando se le valora adecuadamente. Los profesionales mayores de 55 años no representan un lastre del pasado, sino un puente insustituible que conecta la experiencia acumulada con las posibilidades del futuro.
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