“Entrenar estimula muchas sustancias químicas cerebrales que pueden hacerte sentir más feliz, más relajado y menos ansioso. También es posible que te sientas mejor con tu aspecto y contigo mismo cuando haces ejercicio con regularidad, lo que puede aumentar tu confianza y mejorar tu autoestima. Nunca, nunca dejes de entrenar”, posteo Karen Reichardt en su cuenta personal de X.
Junto al mensaje, la diputada electa por LLA compartió un breve video de su entrenamiento fitness matutino. Utilizando diferentes dispositivos de ejercicio físico, la dirigente libertaria demostró en sus redes sociales su compromiso en el cuidado del cuerpo. Un aspecto estético que viene desde sus inicios como modelo y vedette, cuando participaba en producciones televisivas como “Brigada Cola” y “Peor es Nada”.
Oriunda de Banfield y con un pasado familiar cercano al peronismo, la legisladora electa de La Libertad Avanza esta nuevamente en el foco de todas las miradas. Recientemente, reconoció que su ex esposo, Gustavo Balabanian, había recibido un giro por US$ 230.000 de parte del presunto narcotraficante Fred Machado. El exmarido de Karina Vázquez, verdadero nombre de Reichardt, es un empresario ligado al sector de seguros —a través de la firma Paraná Seguros— y aparece en los registros contables de la empresa de aviación de Machado como beneficiario de esa transferencia.
Inicialmente, Reichardt había desestimado la denuncia periodística como “un disparate”. Pero 24 horas después admitió la transacción y la justificó como una operación aeronáutica —Balabanian habría comprado un avión de Machado años atrás—. “Fue un giro en blanco y él se está comiendo este garrón por mí”, declaró. El escándalo se inscribe en un contexto más amplio: Machado había sido señalado como financista de otro miembro de su espacio político, José Luis Espert , lo que derivó en su declinación como candidato a diputado nacional siendo reemplazado por Diego Santilli.

La carrera política de Karen Reichardt promete establecer una constante renovación, así como lo fue su sendero artístico. La actriz participó en comedias y ciclos televisivos populares, incursionó en cine ( "Tachero Nocturno", 1993) y protagonizó una tapa de Playboy Argentina, consolidando su status de “ícono sexual” en la década de los 90. Con los años, su perfil mutó: dejó atrás la picaresca y se volcó hacia nuevos roles mediáticos, desde la conducción de programas deportivos hasta desembocar en la presentación de un programa sobre bienestar animal, "Amores Perros", emitido por la TV Pública.
Lejos de volver al ostracismo mediático, Reichardt aprovechó su trayectoria pública para reinventarse políticamente. Con una imagen más comedida, orientada al activismo animalista logró mostrarse con un perfil distinto al de sus inicios. A los 56 años, el giro de vedette a candidata de un partido de derecha plantea un capítulo singular en la historia reciente de la política argentina. Una combinación de protagonismo mediático, reinvención profesional, activismo social y controversia judicial.














Comentarios