Aunque los anticonceptivos orales han estado disponibles para las mujeres durante casi 60 años, no hay nada equivalente para los hombres, algo que podría cambiar: en la última reunión de la Sociedad de Endocrinología de los Estados Unidos un grupo de investigadores presentó un nuevo fármaco que podría, finalmente, dar una respuesta a la búsqueda.
La droga experimental es la 11-beta-MNTDC y acaba de ser probada en un ensayo clínico de fase I entre 40 hombres. "Nuestros resultados sugieren que esta píldora, que combina dos actividades hormonales en una, disminuirá la producción de esperma y preservará la libido", aseguró la bióloga de reproducción masculina Christina Wang del Instituto de Investigación Biomédica de Los Ángeles.
El 11-beta-MNTDC es una molécula híbrida, una forma modificada de testosterona con características tanto progestacionales (bloqueo de esperma) como androgénicas (equilibrio hormonal). Cuando las dos hormonas están separadas, el cuerpo procesa dosis idénticas a diferentes velocidades. La progestina detiene la producción de esperma, pero también disminuye los niveles de testosterona; y si esta última baja demasiado, aumentan las probabilidades de coágulos de sangre y depresión y otros problemas.
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"Queremos que las hormonas se activen y disminuyan juntas", explicó Wang. Como esta píldora siempre combina la progestina con algo similar a la testosterona, la hipótesis es que la molécula mantendrá el recuento de espermatozoides bajo mientras asegura que haya suficiente hormona sexual modificada para mantener las funciones normales.
Durante 28 días, 30 de los varones participantes del estudio tomaron una dosis diaria más baja o más alta de 11-beta-MNTDC, mientras que los 10 hombres restantes tomaron placebo. Quienes ingirieron la 11-beta-MNTDC no tuvieron efectos adversos graves ni problemas clínicos significativos (algunos informaron haber experimentado fatiga, dolores de cabeza y acné) pero mostraron niveles muy reducidos de dos hormonas, LH y FSH, necesarias para la producción de esperma.
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Aunque los resultados son promisores, los expertos advierten que habrá que esperar varios años antes de que un medicamento como el 11-beta-MNTDC esté disponible en el mercado. Ya se están planificando los ensayos de seguimiento y también pruebas con una sustancia química funcionalmente similar llamada undecanoato de dimetandrolona (DMAU).
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¿Por qué tanta espera? De acuerdo con los expertos es imprescindible verificar que el fármaco sea no solo seguro sino que hay que corroborar que sea efectivo a la hora de bloquear la producción de esperma a punto tal de prevenir un embarazo. "Este estudio es muy corto y necesitamos tres meses, si no más, para detener la producción de esperma -explica Wang-. Hasta ahora demostramos que apaga las hormonas que controlan la función de los testículos".
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