La intimidad del gran Juicio
“La hermandad de los astronautas”, de Ricardo Gil Lavedra. Sudamericana, 297 pgs. $ 4.499.
El Juicio a las Juntas que se realizó entre abril y diciembre del año 1985 fue uno de los momentos trascendentes de la historia argentina. Inédito y gigantesco, los hombres encargados de llevarlo adelante tuvieron que enfrentar enormes desafíos, tanto por la cantidad de denuncias que debían considerar en el proceso, como por el clima político en el que trabajaron.
Ricardo Gil Lavedra, con tan solo 35 años, fue uno de los jueces que integró la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal, tribunal que tuvo la tarea de juzgar a los responsables de la dictadura militar. Con el título “La hermandad de los astronautas”, acaba de publicarse su memoria de ese juicio, un relato imprescindible para conocer los caminos legales y políticos que confluyeron en el proceso judicial de la llamada “Causa 13”.
El texto es la historia de cómo se consolidó un andamiaje legal para juzgar miles de casos en un tiempo récord, pero también el relato de la aventura de seis hombres muy jóvenes, que se atrevieron a enfrentar a la institución más poderosa del país a lo largo del siglo, las Fuerzas Armadas. Con un lenguaje coloquial, que permite al lector común comprender mecanismos complejos del derecho, Gil Lavedra no excluye del texto la memoria personal y registra también la intimidad de los camaristas, sus emociones y la amistad que mantuvieron entre sí a lo largo de los años.
Además de explicar procedimientos poco ortodoxos y decisiones controvertidas tomadas durante el juicio, el libro abunda en anécdotas interesantes, por ejemplo, el encuentro inesperado con Alfonsín casi al final de las audiencias, o el modo en que lograron convencer a Hebe de Bonafini de que se sacara el pañuelo en la sala o la lección que Clyde Snow les dio a todos sobre una disciplina entonces desconocida, la antropología forense.
Contra todo pronóstico y esperanza, lograron su cometido: que la “justicia” volviera a ser parte del idioma de los argentinos. “La hermandad de los Astronautas” nos mete de lleno en ese viaje inolvidable y no nos suelta hasta llegar a la última página.
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